Estar
contigo es mi demanda
En
tu cuerpo cobijarme
Donde
pueda infiltrarme
En
tu piel y en tu aroma
Es
la lejanía mi compañera
La
que domina mi tálamo
Quien
me hace soñar en ti
Es
la lejanía tu ausencia
La
celadora de mi frenesí
Mi
carencia más cercana
Somos
dos caminos por andar
Sendas
ocultas por descubrir
Cerca
pero en tu lontananza
Vives
en mí sin estar ni ser
Lejanía
y distancia en mi delirio
Mi
imaginación más inminente
Horizontes
utópicos, quiméricos
De
mis manos te escapas
Agua
que no se puede retener
Eres
viento que rodea mi cuerpo
Lo
rozas y te vas a tu tiempo
Eres
lejanía a mis ojos apagados
No
te ven en la cercanía
Te
evaporas, eres vacío y fluido
No
existen nuestros límites
Eres
mi caristia, mi privación
La
lejanía en mi soledad
Eres
mi urgencia, mi escasez
Insuficiencia
para vivir
Soñarte,
vivirte, anhelarte
Tú
mi lejanía…
Mare
Nostrum 05 – 06 – 2017
Adolfo
A. Morales Borrego
Cómo me gusta volver a leerte, mi querido amigo Adolfo, que tus letras palpiten, que tus emociones hablen, que grite tu alma entre versos y sueños, que no se detenga la pluma de tus latidos, y que la tinta siga escribiendo.
ResponderEliminarMe ha encantado tu poema, es un canto anhelante.... para volar entre tus versos...
Besos enormes.
Soy brisa que acaricia tu alma,
beso que toca tu piel,
palabra que susurra tu sueño,
pensamiento de tu ser,
cercanía desde tus versos,
vuelo entre tus alas,
pupila en tu mirada,
no hay soledad ni distancia,
cuando las almas
se tocan con las letras.
Bellos versos amigo.
ResponderEliminarSigue disfrutando al escribir, pues con ello ganamos nosotros.
Un fuerte abrazo.