De ti me llega ese aliento,
Busco en tus besos el refugio
Que mi boca clama
El lamento de tus lágrimas
Se asilan en mi almohada
Llena de nuestros sabores
De nuestros recuerdos
Son tus caricias las que a mi piel
Marchita ya
Dan vida a mi cuerpo
Y que tú resucitas
Como diosa divina
Son tus palabras
Las que mi ojos ven
Las que mis sentidos sienten
Las que tu boca dicen
Me dices ven
Y voy
Te digo ven
Y vienes
Somos aliento
Somos lágrima
Somos cuerpo
Somos piel
Somos palabras escondidas
Tras nuestra mascara perversa
En un carnaval
Que tu cuerpo y el mío
Celebran nupcias pactadas
Mare Nostrum 14 – 03 2016
Adolfo A. Morales Borrego
Es muy bello Adolfo ,como todo lo que escribes ,gracias por tenerlos
ResponderEliminarSublime... Como siempre, me encanta!
ResponderEliminarHermoso
ResponderEliminarUn besito
Un poema precioso.Saludos
ResponderEliminarImpresionantes tus versos inspiración de los míos, me parecen de una belleza bestial, hacen latir, y desquician las fibras más sensibles, me encantan, y con tus versos también vuelo en inspiración, porque es un placer volar lejos.
ResponderEliminarSomos latidos engendrados,
suspiros fecundados,
besos de lluvia,
jardín de amapolas,
cubiertas de néctar,
alimentando las almas,
bebiendo las pieles,
poro a poro,
beso a beso,
caricia a caricia,
estrechando suspiros,
dando muerte
a nuestras vidas.
Gracias, amigo Poeta, por tanto arte, por tanta belleza, es un deleite siempre leerte. Me encanta que sigas escribiendo, por favor, sigues latiendo, y regalándonos tanta belleza.
Un beso muy grande.
Por cierto, acabo de responder a tu bellísimo comentario, por si quieres ir a leerlo, en la entrada "Trenzando el deseo".
ResponderEliminarMás besos.
De nuevo haces que lo bello sea aún más bello, querido amigo.
ResponderEliminarEres un ser noble con mucha sensibilidad. Mereces la felicidad completa.
Besos.
Me gustan tus versos, Adolfo.
ResponderEliminarCalan en lo más hondo.