Fue
ese abrazo que me diste
Cambiaste
mi vida, no fui yo
Fuiste
tú quien borro mi existencia
Mi
ser, me convertiste en olvido
Ni
te culpo, ni me culpo
Fue
ese abrazo que me diste
Tus
pechos llenos de pubertad
Se
clavaron en mi pecho
Ganas de fusionarme en ti
Una
existencia, la tuya y la mía
Se
Quemo mí sustancia,
Fui
materia y despojo
Cuerpo
sin vida errante
Me
falto ese abrazo
Que me diste
Fueron
esas ansias de besarte
Saciarme
de tus labios vírgenes
Beber de tu aliento
Aun
por descubrir y sentir
Tu
mirada profunda llena
De
una despedida y lejanía,
De
ese adiós que solo yo sentí
Fue
un instante, solo instante
Me
trasmitiste tu calor
De
ese cuerpo tierno y dulce
Me
hiciste tener ganas de ti
Que
aún perdura en el tiempo
Esas
lágrimas que solo yo trague
Nostalgia
que me quemaba
Y
la distancia alimentaba
No
quiso el destino
Que
tu a mi llegaras
Ni
que yo en ti estuviera
Fue
una locura dijeron
Una
sinrazón sin lógica
Una
eternidad ha pasado
Permaneces
en el tiempo
Lo
que el olvido no puede borrar
Fue
ese abrazo que me diste
No
veo tu cara, ni tus ojos
Siento
el aroma de tu cuerpo
Mis
ganas de besar tus labios
De
abrazarte fuertemente
Ni
tú ni yo tuvimos la culpa
La
tuvo…
Ese
abrazo que me diste
Mare
Nostrum 20 – 01 – 2017
Adolfo
A. Morales Borrego
Un abrazo impactante que no has podido olvidar y que tus versoso lo recuerdadn.Saludos
ResponderEliminarSiempre hubo alguien a quien diste ese abrazo que nunca se olvida...un beso
EliminarMi querido y admirado Poeta, te leo una y otra vez, y me dejas sin palabras, disfruto desde el silencio, otras veces vuelvo, y me dan ganas de dejarte las mías, pero siempre disfrutando de tus sentires, tienes un alma tan llena de vida, que me encanta venir a beber del manantial de tus latidos.
ResponderEliminarGracias por existir en este mundo de poesía.
Un beso enorme.
Ese abrazo que cambió tu vida,
esa fuerza que quemó tu cordura,
esas ansias por descubrir,
por saciarte de sus aguas,
por comer de sus manjares,
todo quedó fusionado en un instante
que siempre perdura en el recuerdo.