Hoy
más que nunca me acuerdo de ti,
Echo
de menos tus caricias,
Tus
besos que hacían temblar
Los
cimientos de mi cuerpo
Derrumbabas
lo que construido estaba
Echo
de menos esa mirada poderosa tuya
Hacías
que fuera participe de nuestro pecado
Hubo
tanto amor que aun se desborda en mí
Hubo
tanto de ti y de mí que nadie puede borrar
Fuimos
lo que fuimos y ahora somos
Dos
extraños que el tiempo quiere anular
Aquello
que es utópico e imposible
Tatuada
en mi piel estas, permaneces en mí
Te
amo tanto que me duele el cuerpo
De
esta llaga que no se puede borrar
Aun
sale sangre que fue la de nuestra vida
Mare
Nostrum 14 – 02 – 2017
Adolfo
A. Morales Borrego
Que gran tristeza produce el desamor, tus versos la trasmiten.Saludos
ResponderEliminarQué intenso tu poema, cuánto dolor se desprende en tus palabras, entre las llagas que no se pueden borrar, que permanecen como herida, y que sangra hasta la vida...
ResponderEliminar¡¡¡Bellísimo tu poema, mi admirado Poeta!!!!!
Leerte es erizar la piel y los sentidos, y con tu permiso, me quedo acariciando tus versos para ver hasta dónde me llegan.
Un beso muy grande.
Nunca se podrá borrar tanto amor,
a pesar del tiempo,
a pesar de la distancia,
a pesar de tanto dolor,
fuimos tatuados,
piel con piel,
beso a beso,
grabando nuestras huellas
indelebles para siempre,
imposible olvidar tanto amor.