Soy
ausente de ti
Tú
mis principios, mis raíces
En tu tierra germinaron
Te
he amado, querido y añorado
Te
amo y te amaré eternamente
Te
sigo idolatrando en la lejanía
Con
la ternura que mi mente
Intenta
no borrarme, aun así
Soy
ausente de ti
Son
siete las colinas que te rodean
De
ahí tu nombre que enamora
Ceuta
mía, bella y adorada
Perlas
que engarzan tu silueta
Hacen
que brilles nacarada y perlina
Y
del Mediterráneo te llaman
Quien
te habita se enamora
Culturas
y creencias varias acoges,
Sin
odios desafectos ni temores
Eres
amante y amada
Dentro
de mí te llevo,
Tu
aroma preservo en mi piel
Mis
sentidos no te olvidan
Te
recuerdan con la nostalgia
Que
ese sentimiento da
Que
el levante, el poniente y vendaval
Me
impregne de tu aroma y sabia
Mi
cuerpo quiere tu sabor, tu fragancia
A
tu esencia quiero saber, aunque
Ausente
de ti soy
En
tu tierra nací, vi tu luz
Por
vez primera iluminando mi vida
Mis
juegos y primeros pasos di
Amores,
besos, caricias con sabor a ti
Esa
tierra que como Pompeya
Cubierta
que otras vidas emanaron
Oculta
esta con gentes amantes de ti
Lisboa
se llama, calle impuesta
Antes
Varela calle de mis amores
Fuimos
los que tu tierra
Hubimos
de arañar para
Llevar
el yantar a nuestra progenie
Nunca
faltaron besos y abrazos
Fuimos
familia, familia somos
Aquellos
que en la pobreza, la carencia
La
tristeza y la humildad,
Con
orgullo fuimos y somos caballas
Pero
ausentes de ti estamos
Cuerpos
en otras tierras reposamos
Nuestras
ánimas vuelan
Sobre
tu santo y mágico perfil
Allí
quedamos, pero en ti existimos
Siempre
estaremos presentes
Aunque
seamos ausentes
Caballa
soy, orgullosa estoy
Muchos
recuerdos los que tengo
Mis
padres, mi familia, emigramos
Ausentarnos
de ti tuvimos
Otras
gentes y culturas nos acogieron
Somos
parte de ellos, integrados
Seguimos
siendo caballas
Orgullosos
de serlo estamos
Buscamos
los mejores campos
Para
que nuestra cosecha
Floreciera
y fuese fértil
Con
trabajo y esfuerzo lo conseguimos
En
ti dejamos nuestra juventud
Con
la esperanza de volver
Aunque
solo fuese para verte
Florecer
y ser más hermosa
Te
declamo un poema antiguo
Que
en mi mente permanece…
“Autoridades
presentes
Por
vuestra sangre sagrada
Poned
al Cristo en el puente
Donde
antiguamente estaba”
Allí
permanece con su puente
Orgulloso
de ser caballa
Mucha
es la gente que ante él pasa
Algunas
le veneran, otras le respetan
Aquellos
que ateos se designan
Respeto
le tienen al verle
Cristo
que en su puente está
Allí
eternamente permanecerá
Cuando
en la lejanía vi tu silueta
Por
esa ausencia impuesta
Te
mire en el horizonte viendo
Tu
bello perfil con tus siete colinas
Guardianas de tu belleza
La
congoja amartillaba mi corazón
Lagrimas
mudas hube de tragar
Sabiendo
que tú eras mi final
En
tierras de Boabdil nací
Caballa
de corazón soy
Cantarina
es mi voz,
El
cantar siempre me gusto
Llore
mi marcha al dejar
Mi
tierra, a mis padres
Lagrimas
que se secaron
Al
volverlos a ver y tener
Aquí
permanecen eternamente
Aunque
lloraron tu ausencia
Yo
que mi cuerpo en tu
Tierra
yace como el de aquel
Que
en vida tanto me dio y ame
Alegría
sentía cuando
Sus
bellos ojos azules como
Tu
cielo me miraba
Su
pelo rubio a tu viento
De
levante o poniente bailaba
Desde
este otero te miramos
Te
seguimos viendo bella
Hermosa
entre todas la perlas
Que
el Mediterráneo pueda albergar
No
somos ausentes, en ti estamos…
Este
escribidor de letras
Al
que algunos osan llamar poeta
Caballa
me siento sin nacer en ti
Llevo
tu nombre siempre allí
Donde
reposen mis sentidos
Y
mis letras puedan declamar
Nació
mi madre, mis mujeres
Más
amadas, queridas y deseada
Aquel
primer y único amor
Que
en mi silencio permanece
Y
callado está en mi interior
Mis
hijos en ti nacieron
En
ti reposan las cenizas
Del
primero de ellos en ese foso
Donde
las dos mares de juntan
Ese
fue su deseo, cumplido esta
Al
lado de ese Cristo caballa
En
su puente que lleva su nombre
Te
amo a ti como principio y fin
Eres
la perla que engarza
Mis
sentidos y sentimientos
Te
hicieron bella tus gentes
Y
grande tu historia inigualable
Mí
querida adorada y amada…
Ceuta…
Ausente
de ti somos y soy
Mare
Nostrum 18 – 04 – 2017
Adolfo
A. Morales Borrego
NOTA:
Para esa familia tan maravillosa que hizo que mi infancia fuese feliz y dulce.
También
para todos aquellos que tuvieron que emigrar buscando el bienestar de su
familia, pero que en su recuerdo siempre permanece el nombre de Ceuta.
